Danza tradicional en la que los bailarines, entrecruzándose unos con otros, realizan figuras acompañando sus movimientos con golpes dados, al compás de la música, haciendo chocar varios palos o bastones entre sí. Los ejecutantes, tradicionalmente hombres –aunque existe alguna modalidad infantil y no es extraño que en la actualidad sea interpretado también por mujeres–, actúan en número variado –dependiendo de lo que marque la tradición local–, pero siempre par, debiéndose añadir a tal número de danzantes otra figura imprescindible, la del maestro de ceremonias o director de la danza. Los bailarines llevan a veces un solo bastón (quizás sustitutivo de una antigua espada), que sujetan entonces con la mano derecha, o dos (en este caso, los palos son más cortos que en el anterior), cogiendo uno con cada mano, y palotean con ellos, esto es, tanto con los propios (si son dos, cruzándoselos por encima de la cabeza, a la altura de las piernas y entre ellas o...