Militar en activo durante la segunda mitad del s. XIX. Inició su carrera en el ejército liberal, pasando muy joven a Cuba, donde, por su distinguido comportamiento en el combate de Cárdenas (19-V-1850), se le concedió el grado de comandante, una espada de honor y la tenencia del Gobierno político y militar de Cárdenas. Fue él quien propuso al capitán general de la isla la creación de los Cuerpos de Voluntarios, encargándose él mismo de la organización de las primeras fuerzas formadas, esto es, las llamadas “Compañías de Cárdenas”. De nuevo en la metrópoli, participó en la campaña de África (1859-1860) como ayudante de campo del general Makenna y, una vez acabada la contienda, se le confió el mando provincial de Valladolid. Al ser destronada la reina Isabel II (1833-1868), pidió el retiro y, tras serle concedido, ofreció sus servicios al pretendiente Carlos María de los Dolores de Borbón y Austria-Este, quien los aceptó. En 1873 fue destinado, como segundo...